“Pipo” sería hoy en día un juguete “políticamente incorrecto” un claro mal ejemplo…
Un niño que fuma incorregiblemente, con la habilidad de hacer pequeños círculos humeantes de su pequeño cigarro…
Cuando se terminaban los cigarritos que traía, no recuerdo si se le podía comprar más… o había que comprar otro “Pipo”… El caso es que era un juguete dado a la destrucción. Por su fragilidad o por el tabaquismo que hacia que se quemara los labios.