He leído por alguna parte que a partir de 1820 los cromos troquelados empezaron a tener mejor color, fueron unos años más adelante a partir de 1835 cuando ya empezaron a tener un aspecto con mejor colorido, diferentes estampados, relieves y troquelados. Se utilizaban como adornos en cartas, y tarjetas de visitas y se pegaban en muchos y diferentes sitios.
A quien no le gusta unos cromos como estos, para jugar o coleccionar, los llamados de picar o palmar, más de un niño jugó con estos cromos de sus amigas, yo lo confieso, y me lo pasé pipa! Un clásico de toda la vida que ha sobrevivido al pequeño kiosco de chuches y baratijas de los años 60 y 70. Un clásico de la categoría de las: trompas, yo-yo, canicas, cuerda de saltar y estampas de álbumes.
