EL KIOSKO

12 jul 2018

CALCOMANÍA CON GLOBO FESTINA


Los tatuajes de agua siempre me han gustado mucho. Sobre el 67 al 70 los llevaba en ocasiones, fue la época que más me dio por llevar calcomanías en los estuches escolares, libros y libretas, carteras, y sobre todo en el brazo, incluso en la parte de arriba de las manos.

Cuando lo llevabas tiempo puesto en la piel, al día siguiente los tenias agrietados y con los bordes ennegrecidos, algunos de ellos pelados por la mitad. Había que restregar y lavarse las manos y brazos. Recuerdo a mi madre siempre en grado de vigilancia para que no me pusiera más de la cuenta.

Me encantaba el proceso de implantación de la colcomanía en la piel. En casa bajo el grifo para humedecerlo bien y luego mover el cartoncillo despacito para no dañar el “tatu” o en la calle y con las prisas por ponérmelo con saliva y restregando el dedo por encima del cartoncillo que también era efectivo.

Les pongo unas calcomanías; en esta ocasión salían con un globo de FESTINA elaborado en Murcia. A una peseta la calcomanía y el globo. Esto era el kiosco de los años 60, 70...