Normalmente
se compran los dos o tres primeros números como mucho y luego la gente se cansa
de gastarse dinero ya que los fascículos cada vez son más caros y las entregas
se hacen interminables.
Kiosqueros
y clientes coinciden en que sólo se adquieren los primeros fascículos porque
luego se sube de precio y no se mantiene el de lanzamiento.
También
en estos días proliferan en los kioscos las colecciones de cromos, una clásica
que nunca falla es la de los jugadores de la Liga de fútbol, aunque también
existen de otros tipos.
Muchos
de nosotros seguro que recordamos cuando los agentes comerciales de estas casas de
coleccionables se presentaban en las horas de entradas o salidas de la escuela
para regalarnos algunos sobres de cromos o algún que otro álbum vacío para
engargarnos y que comenzáramos con aquellas colecciones, el cebo ya estaba
echado, solo quedaba esperar, la publicidad era cosa nuestra, el boca a boca
entre nosotros y seguidamente el hervidero de niños y niñas con la lista de los
cromos en las manos que se iban tachando a medida que conseguíamos los ansiados
cromos que nos faltaban en el álbum ¡TENGUI, TENGUI, FALTIII!
Y
es que el inicio de un nuevo curso escolar era y son momentos ideales para
iniciar una colección, ya que los álbumes de cromos han sido parte de muchas
generaciones y todos hemos coleccionado o coleccionamos algún que otro álbum.
Aprovecho
para recomendaros una película que me gusta mucho y que tiene relación con este álbum de cromos que os enseño "VIDA Y COLOR" No podía tener otro titulo jejejeje.
No podemos olvidarnos de los pegamentos, colas, gomas o adhesivos que son junto con el papel los elementos fundamentales de un buen recortable o de uno de aquellos viejos álbumes (hoy día muchos de los cromos ya son autoadhesivos) y si me apuras a falta de pan, buenas son tortas, un vaso con un poco de agua o huevo con unas cucharaditas de harina amasada y ya teníamos la cola para enganchar los cromos, aunque con el tiempo estos mismos se desprendían y tenías que tirar del Imedio.
El pegamento que más usé cuando era niño, tanto en las manualidades del colegio como para armar recortables o pegar cromos en un álbum, fue el Pegamento Imedio, han pasado ya muchos años pero sigo recordando muy bien su olor tan intenso.
Este adhesivo nació en el año 1935 en Calzada de Calatrava (Ciudad Real) y fue creado por Gregorio Imedio, a base de disolver celuloide con acetona.
Terminada la guerra civil, fundó en 1944 junto con su cuñado Pedro Ciudad, la empresa Productos Imedio y empezaron a fabricarlo y comercializarlo.
A pesar de los gratos recuerdos que me trae este pegamento "el Imedio" debo de decir que aunque ciertamente fue el que más utilicé, no fue mi preferido, siempre que podía escoger a la hora de comprar pegamento, elegía mi favorito el bu' qué le vamos a hacer, soy un fan desde niño del Conde Drácula jejejeje.
Aquí os enseño algunas cosillas que guardo como oro en paño dentro de la colección de mi baúl, que también tienen relación con lo publicado hoy en "EL BAÚL DE HAL" sección colaboradora del Kiosko de mi querido amigo Akela.